SEMINARIO 3x3 EN SEMANA SANTA 2018

SILUETAZO MÉXICO

Alberto Híjar Serrano

La convocatoria de un grupo de activistas de la UNAM para realizar siluetas que le den presencia a secuestrados, desaparecidos por las policías y las fuerzas armadas, fue respondida por familiares de procedencias diversas. La acción okupó la Plaza Leona Vicario frente a la Iglesia de Santo Domingo a espaldas de la Secretaría de Educación Pública.

El 14 de febrero es significativo para las Fuerzas de Liberación Nacional descubiertas por la seguridad del Estado a raíz de la incursión en una casa de seguridad en Monterrey. Con la participación de la Federal de Seguridad con Miguel Nazar Haro a la cabeza, ejército y policías asaltaron la casa en Nepantla donde masacraron cinco compañeros y capturaron a una pareja de sobrevivientes. Solo el cadáver de Deni Prieto fue entregado a sus familiares luego de engorrosos trámites. De ahí el operativo siguió hasta El Chilar en Chiapas, desde donde nueve combatientes de élite organizaban el primer campamento guerrillero Emiliano Zapata en las cañadas de Chiapas. “Los Primeros” como los llama el EZLN, fueron masacrados y sus cadáveres desaparecidos. Se sabe que Elisa Irina Saenz, única mujer en el grupo y Raúl Pérez Gasque, fueron conducidos moribundos por la tortura al Campo Militar 1, tumba y cementerio de cientos de opositores políticos al Estado mexicano. En la casa de Nepantla fue encontrado un documento con el nombre de Alberto Híjar que de inmediato, el 14 de febrero de 1974, fue sacado de su casa y desaparecido, torturado, hasta que las protestas de origen muy variado, lograron la presentación de él y once colaboradores de Monterrey depositados en los separos de la Procuraduría General de la Republica para ser encarcelados en Lecumberri. Todo esto fue comunicado a los activistas al pie del monumento a la libertadora Leona Vicario quien tuvo que sortear persecuciones que la forzaron a parir en una cueva para al fin participar en el triunfo de la primera Revolución de Independencia. Dos siluetas de Alberto Híjar acompañaron otras, alrededor de 18, colgadas en los limites de la plaza para quedar de pie, tal como recomiendan las Madres de Plaza de Mayo, participantes de la resistencia convocada por los artistas Julio Flores, Rodolfo Aguerreberry y Guillermo Kexel quienes lograron reunir 30,000 siluetas, cada una por los desaparecidos forzadamente por las dictaduras en Argentina. La acción en 1983 ha sido documentada y reflexionada por los propios promotores para ganar su reproducción en otros lugares.

La brutal represión contra las FLN no logró su extinción pese a la pérdida de sus cuadros de dirección, especialmente Cesar Yáñez. La reorganización necesaria prevaleció en clandestinaje estricto para dar lugar al EZLN veinte años después.

El edificio con gran antena con el despacho e instalaciones necesarias para los trabajos de la Brigada Blanca de Miguel Nazar Haro con licencia ilegal para matar, torturar y secuestrar, permanece tal cual en la Circular Morelia entre Avenida Chapultepec y la calle de Puebla, frente a un pequeño jardín. Cuando Nazar se retiró acusado por la justicia yanqui como traficante de autos de lujo robados, nada se movió en su despacho de servicios de seguridad privada manejado con su hijo del mismo nombre. Luego de la muerte del criminal de Estado, el edificio alberga oficinas de la policía metropolitana, como prueba de la relación entre lo legal y lo paramilitar ilegal. Del estacionamiento adonde llegamos en el piso de automóviles sin placas, fuimos conducidos a los separos de la Procuraduría General de la República y de ahí a la cárcel de Lecumberri. El sistema es integral. Fue el Estado.

Ahora que una comisión de cuidado del patrimonio cultural en la Ciudad de México coloca placas en edificios históricos, bueno sería señalizar las cárceles clandestinas donde fuimos desaparecidos y torturados cientos de militantes de organizaciones revolucionarias.

15 febrero 2018